A propósito de Lisandra

Por: Glauber García Lara
Colaboración del Maestro Nacional Orlando Otaño Ordaz

Definitivamente la Federación Cubana de Ajedrez dio a conocer la integración de los equipos que nos representarán en la Olimpiada Mundial de este deporte a celebrarse en Dresden, Alemania, del 12 al 25 de noviembre de este año.

Para orgullo y beneplácito de los amantes del juego ciencia en Vueltabajo, la Maestra Internacional Lisandra Ordaz se convirtió en la primera pinareña que integre un equipo olímpico en la historia de esta disciplina.

Lisy, como la conocen amigos y familiares, comenzó desde muy temprana edad la práctica de este fascinante juego en su natal Consolación del Sur bajo las orientaciones del profesor José Colls.

Allí obtiene sus primeras alegrías y medallas y comienza a forjarse una vertiginosa carrera que la ha llevado a planos estelares en el ajedrez nacional.

Lisandra ganó medallas en todas las categorías por las que transitó y entre sus resultados más importantes se incluyen los dos subtítulos obtenidos en los campeonatos nacionales de mayores de 2006 y 2008, así como su flamante título de Maestra Internacional.

Dotada de un talento poco común y un carácter intransigente, a pesar de la gracia femenina que la acompaña, es dueña de un lógico y exquisito juego posicional; de una solidez envidiable que a ratos nos hace soñar con la posibilidad de convertirse en poco tiempo en la primera mujer cubana que logre la anhelada cifra de 2400 puntos ELO y ubicarse entre las primeras 100 jugadoras del planeta.

No sería justo terminar sin hacer alusión a los profesores que mucho influyeron en el desarrollo ajedrecístico de Lisandra, especialmente al MF José Manuel Cruz Lima y los demás entrenadores que trabajaron con ella.

Por último quería referirme a dos personas que no han olvidado el más mínimo detalle sobre la educación y preparación de Lisy: Leticia y Rubén, sus padres, pues creo firmemente que sin sus consejos y atinadas indicaciones serían imposibles todos los logros de Lisandra.
Mientras nosotros seguiremos soñando, convencidos que lo mejor está por venir.